El Príncipe de Egipto – Mi Película Favorita de Toda la Vida
Quiero cerrar el año con una película que tiene un profundo significado para mí. Sobre todo para celebrar los 25 años desde que se estrenó. Estoy hablando de El Príncipe de Egipto.
Siendo esta la segunda película del estudio novato de animación en aquél entonces, DreamWorks Animation, el Príncipe de Egipto fue el proyecto más ambicioso del productor Jeffrey Katzenberg, quién solía trabajar en Disney. ¿Por qué aunque poco conocida, es considerada una joya de la animación?
Desde el inicio se nos dejan en claro que esta es una adaptación del libro del Éxodo con varias libertades creativas. Es la historia de como Moisés liberó a los hebreos de la esclavitud de los egipcios. Si bien hubo varias adaptaciones de esta historia, siendo Los Diez Mandamientos la más famosa de la historia del cine, siento que la película animada es más poderosa y emocionante. Uno de los puntos más fuertes de esta historia es la relación de hermanos entre Moisés y Ramsés. Realmente simpatizas con ellos a pesar de sus diferencias. Uno quiere liberar a su pueblo, mientras que otro quiere que su reino prospere. Un punto criticable es que el uso de humor se siente fuera de lugar en algunas ocasiones, pero siento que hubo peores casos, incluso en tiempos más recientes.
Los personajes son otro punto fuerte de la película. Moisés empieza siendo un príncipe arrogante y problemático, hasta que se da cuenta de su verdadero origen y aprende a ver los defectos de Egipto hasta convertirse en un hombre sabio y humilde. Ramsés es el otro lado de la moneda. Él quiere a su hermano y haría lo que fuera para mantenerse juntos. Por desgracia, sus obligaciones como sucesor para gobernar de Egipto lo obligan a cometer atrocidades. Los demás personajes, aunque no tan desarrollados como los principales, cumplen muy bien su papel en esta épica historia.
La animación también es algo increíble. Muchos, incluyéndome, confundieron esta película como una de Disney debido a su estilo tan similar. Lo cierto es que muchos animadores de este filme trabajaron anteriormente en Disney. Desde personajes moviéndose de forma muy realista hasta el diseño de personajes que se asemejan a las pinturas egipcias. Uno de los mayores puntos fuertes de la animación, son las expresiones faciales de los personajes que muestran las emociones de una forma sutil y discreta. Y también el uso de CGI, que en algunos aspectos luce anticuada, en su época era revolucionaria. Sobre todo, en los momentos más épicos de la cinta.
Finalmente tenemos las canciones, las cuáles fueron escritas por Stephen Schwartz, quién aparte de dirigir musicales como Wicked, también escribió canciones de Disney como Pocahontas y el Jorobado de Notre Dame. El resultado son canciones estilo broadway donde los personajes expresan sus emociones de forma apasionada. Eso, combinada con la banda sonora de Hans Zimmer, tenemos uno de los musicales más grandes que cualquiera que le gusta el género, debe escuchar.
En conclusión, El Príncipe de Egipto es mi película favorita de todos los tiempos. No sólo por la épica historia, los inolvidables personajes, la increíble animación y las hermosas canciones; sino que cada año encuentro algo nuevo y especial sobre este filme. Es más que una excelente película, es una experiencia increíble. La he visto muchas veces en el pasado y planeo verlas muchas veces más en el futuro.